Samsung presentó su reloj inteligente Galaxy Gear durante la feria de electrónica IFA de Berlín, realizada en los primeros días de septiembre. El smartwatch salió a la venta el 25 de septiembre en Londres e inicialmente permitía conectarse únicamente con la Galaxy Note 10.1 y la Note 3, la phablet de la empresa también presentada en IFA.

Tal como había adelantado al momento de presentar al Gear, Samsung decidió ampliar la compatibilidad del smartwatch con otros de sus teléfonos: mediante la actualización de Android a 4.3, ahora los dueños de Galaxy S4, SIII y Galaxy Note 2 también podrán conectar sus teléfonos al smartwatch. La actualización será liberada a fines de este mes.

Asimismo, la empresa anunció que continuará ampliando la cantidad de teléfonos compatibles con su reloj, entre los que se encuentran el Galaxy S4 Mini, Galaxy S4 Active y Zoom y Galaxy Mega en sus dos versiones. Estos teléfonos también recibirán la compatibilidad mediante una actualización del software.

Al ampliar la compatibilidad del reloj con más dispositivos, Samsung puede ampliar la llegada de su smartwatch a una mayor cantidad de potenciales usuarios, dueños de un S4, SIII o Note 2 y el resto de los smartphones que podrán utilizarse próximamente con el reloj.

El Gear, conectado al teléfono, permite realizar y tomar llamados, así como chequear notificaciones, además de ver y filmar videos y tomar fotografías con la cámara de 1.9 megapíxeles con la que viene integrada.

Viene equipado con una pantalla super AMOLED de 1,63 pulgadas, con resolución de 320 x 320 (277 pixeles por pulgada), mientras que en su interior se encuentra un procesador de 800MHz, 512MB de RAM y almacenamiento de 4GB. Tiene Bluetooth 4.0 y una batería de 315 mAh, que dura hasta un día.

Con su lanzamiento, Samsung da otro paso en materia de accesorios inteligentes, en lo que se adelantó al rumoreado iWatch de su archirrival Apple, sobre el cual circularon varias versiones en la web, a pesar de que la compañía no hizo referencia a su posible lanzamiento.