Esto no parece ser un problema serio hasta que llevamos el caso a una escala mayor, pues el mismo analista indica que gracias a la información obtenida por la extensión se puede saber en qué momento los usuarios utilizan su celular para conectarse y desconectarse de WhatsApp, incluso podrías sacar conclusiones para saber si dos contactos podrían haber entablado una conversación entre ellos, aunque afortunadamente no hay forma de saber concretamente esta información.

Esta información podría ser aprovechada por distintas empresas que se dedican a recolectar información de los usuarios para después lucrar con ella al poder conocer millones de patrones de la conducta de los usuarios que utilizan WhatsApp a diario.

A pesar de que no es información sensible para la mayoría de los que usamos WhatsApp a diario, es un hecho que esta información es privada, y únicamente la compañía de mensajería sería la única que puede acceder a este tipo de datos, por lo que entonces se convierte en un problema de invasión a la privacidad.